Descripción
Este curso está adaptado a cada una de las Comunidades y te prepara para superar las Oposiciones al cuerpo de Guardas Forestales convocadas por las diferentes Comunidades Autónomas. Son unas oposiciones no demasiado demandadas por lo que las posibilidades de conseguir una plaza son mayores.
Las funciones de un Guarda Forestal son variadas:
• Vigilar como Agente de la Autoridad el cumplimiento de la normativa en materia de montes, caza, pesca fluvial, incendios forestales, espacios naturales protegidos, vías pecuarias, etc., cursando denuncias por infracciones que se generen.
• Realizar trabajos de silvícolas, repoblaciones, viveros.
• Realizar marcaciones, mediciones de arbolado, cubicaciones, señalizaciones de puestos de caza, cotos, refugios, repoblaciones piscícolas y cinegéticas y demás trabajos relacionados con su ámbito de actuación.
• Canalizar las solicitudes de autorización de cortas y quemas de matorral en montes particulares, controlando posteriormente su ejecución.
• Informar a sus superiores sobre los sucesos e incidencias ocurridas en la zona asignada, así como sobre la situación de la infraestructura rural. Cumplimentar y cursar los partes, denuncias y solicitudes que se presenten.
• Cuidar del mantenimiento o buen estado del vehículo y las herramientas asignadas.
- Temas relativos a la Constitución, Corporaciones Locales, Comunidad Autónoma y procedimiento administrativo.
- Temas específicos sobre la legislación de protección de los Espacios Naturales, de Caza, de Pesca, Incendios Forestales, y Legislación de Montes.
- Temas específicos/prácticos sobre botánica, explotación y ordenación de montes, plagas más importantes, principales especies cinegéticas y piscícolas, viveros y repoblaciones forestales.
- Temas relativos al Medio Ambiente en la Comunidad correspondiente.
Requisitos Generales
- Nacionalidad española o nacional de un Estado miembro de la Unión Europea o nacional de un Estado en que sea aplicable la libre circulación de trabajadores.
- Tener cumplidos los 16 años de edad, y no haber alcanzado la edad de jubilación
- No padecer enfermedad ni estar afectado por limitación física o psíquica, que sea incompatible con el desempeño de las correspondientes funciones.
- No haber sido separado, mediante expediente disciplinario, del servicio de cualquiera de las Administraciones Públicas, ni hallarse inhabilitado para el desempeño de funciones públicas.